El episodio 29 de Dragon Ball Super «Está decidido: ¡estamos esperando un certamen de artes marciales! El capitán del equipo es incluso más fuerte que Goku» se centra en los preparativos para el próximo torneo de artes marciales que enfrentará a cinco guerreros del séptimo universo que representan al Dios de la Destrucción Beerus contra cinco luchadores del sexto universo que conforman el equipo elegido por el Dios de la Destrucción Champa. El certamen se celebrará en el planeta sin nombre cinco días después de la visita de Champa al planeta de Beerus. En este intervalo de tiempo ambos Dioses de la Destrucción deberán seleccionar a los púgiles que se verán las caras en el duelo interuniversal a la vez que Bulma emprenderá la búsqueda de la séptima super dragon ball.
A petición de Son Goku y de Vegeta, la competición de lucha que decidirá el destino de la Tierra del séptimo universo seguirá las mismas reglas que un Tenkaichi Budōkai. Es decir, perderá aquel participante que salga del terreno de combate, el que se rinda o el que mate a su oponente. Por su parte, Vegeta decide añadir un test psicológico para evaluar la inteligencia de los luchadores a fin de que comprendan las normas del torneo y no sean monstruos descerebrados. Tanto Champa como Beerus aceptan las sugerencias de los dos saiyans, dando así por zanjada la visita de los viajeros del sexto universo. Estos, al llegar al lugar donde se celebrará la competición, traen consigo las seis esferas mágicas de tamaño planetario. En cuanto a la construcción del estadio, Vados se encarga de generar con su báculo una cúpula especial que alberge el recinto en el que creará el estadio, al cual le subministra oxigeno, un cuadrilátero de 50 m2, unas gradas, tiendas de comida y dos retratos de los Dioses de la Destrucción del sexto y séptimo universo. Una vez terminada la obra, solo falta esperar al día señalado.
Bulma, tras comprobar que Shenron desconoce el paradero de la séptima esfera gigante, decide confeccionar un radar dragón más potente que el que hizo años atrás para poder así localizar super dragon balls y evitar que Beerus pida un deseo cuando se reúnan las siete esferas de poder ilimitado. No obstante, el ratio que alcanza este nuevo ingenio de la hija menor del doctor Brief solo alcanza una distancia relativa al lugar del universo desde donde se esté. Por ello, llama a su hermana Tights para que contacte con Jaco y le asesore sobre cómo llegar al centro del universo. De ese modo, podrá rastrear la energía que emiten las super dragon balls con mayor eficiencia. Por otro lado, Beerus ha elegido a Monaka como tercer miembro de su equipo que peleará en el torneo de artes marciales mientras que Goku y Vegeta tienen la tarea de encontrar a los otros dos competidores.
Como ya es habitual en esta serie, los capítulos de transición se caracterizan por estar inundados de escenas cómicas y este no es una excepción. Si bien ridiculizar a Vegeta cuando Beerus le orden que busque por la Tierra las dragon balls no despierta una carcajada en el espectador, sí que lo hace el hecho de que Goku se olvide de pedirle a Shenron que resucite a Kaiō cuando tiene la oportunidad porque nunca se acuerda de que uno de sus maestros está muerto por su culpa. Esta pequeña falta de memoria le brinda al episodio un toque humorístico con un gesto sencillo que entona con la personalidad bobalicona del saiyan criado en la Tierra. ¿Se acordará alguna vez de pedir ese deseo?
Todo el mundo se está preparando para el próximo torneo de artes marciales que enfrentará al séptimo universo contra el sexto universo en una batalla nunca antes vista ni oída en Dragon Ball. En el próximo episodio de Dragon Ball Super que se titula «Entrenando para el torneo de artes marciales. ¡¿Quién serán los otros dos miembros?!» los personajes se entrenarán para estar a la altura de un certamen de tal magnitud. El devenir de esta saga se podrá seguir el próximo domingo a las nueve de la mañana, hora japonesa, en Fuji TV. ¡No os lo perdáis!
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